" Y algunas veces suelo recostar
mi cabeza en el hombro de la luna
y le hablo de esa amante inoportuna
que se llama soledad. " ( Joaquín Sabina )
Esta noche, me he dormido, recostado entre las nubes...
Entre las nubes de mis días y mis noches...
Entre las nubes que pueblan mis cielos...
Entre blancas nubes de algodón parecidas a las nubes con las que los niños sueñas, recostaditos en sus cálidas cunas...
Unas nubes, de inmaculada blancura nívea, y aspecto algodonoso y suave, que invitan, que incitan a recostarse entre ellas, y dejarse llevar, agarradito en volandas, por las hadas de los sueños, que irremisiblemente me conducen a los mundos de Morfeo.
Un mundo, en el que todo es posible, en el que lo real se hace ficticio y lo irreal...real...
Un mundo en el que los mas íntimos deseos, pensamientos y anhelos tienen cabida, sin temor a que alguien nos tache de locos orátes, de tarados enamorados de la mar, de la luna y de la noche; cuya imaginación...está desbocada, y sin control, vaga por lo etéreo del subconsciente, buceando entre viejos recuerdos y olvidadas nostalgias...
Un lugar donde la ternura tiene su hogar, alejada del mundanal ruido y de las gentes que viven su día a día, embebidos , inmersos en sus problemas y en su existencia...y subsistencia...
Un remanso de paz entre el cotidiano cáos de la humanidad...
Un paréntesis; punto y aparte en la existencia, que parece pararse en esos momentos felices, en los que quisiéramos parar las manecillas del implacable reloj, o en todo caso atrasarlas de nuevo, para que esos momentos se dilatasen para toda la eternidad...
Una eternidad poblada por hadas, magos y brujas, buenas y malas. Aves del paraíso y corceles alados, con y sin cuerno en la frente...
Un lugar, en el que en los crudos inviernos, las rosas también florecen y las violas y petunias tapizan los caminos...
Un lugar donde se encienden hogueras en las plazas, para ahuyentar al lobo, como decía la canción.
Donde las guerras, sólo son entre soldaditos de plomo con los que los niños juegan...
Donde no existe el tiempo ni la edad, y la enfermedad sólo es un lejano recuerdo del pasado...
Donde en las calles, crecen las madreselvas, que trepando por los edificios, tapizan tejados y chimeneas...
Donde en vez de sirenas, lo que se escucha es música de violines y campanillas, y donde las mariposas se posan a tomar el sol sobre las señales de tráfico...
Un mundo diferente, extraño a muchos ojos, donde en vez de fuentes, en los parques hay lagos llenos de peces de colores, y donde los mercados, aun siguen siendo aquellos antiguos lugares donde la gente compraba alimentos, frutas y verduras, anunciadas a voz en grito por las alegres fruteras y verduleras con cantarinas voces de coro de orfeón...
Un lugar donde la paz es la reina y señora, adorada y respetada por todos, y donde esa paz, ayudada por otra dama a quien llaman justicia, reparten a diario dosis de alegría y humanidad en ese mundo, donde ya tienen de sobra...
Un lugar donde me gustaría quedarme para siempre...
Si buscas ese lugar, lo hallarás...
Tal ves allí, justo debajo; en la falda de las montañas...
Sólo tienes que cerrar los ojos, oír, recordar y dejarte llevar...
tal vez allí, al igual que yo, encuentres tu lugar...
Tal vez ahí...Puedas hacer realidad tus mas ansiados sueños...
Recuerda...
Sólo tienes que buscar...En tu interior...
Sólo tienes que buscar...entre tus sueños...
...Háganme un favor...Quieren ?...
...Sean felices...
( O por lo menos...Inténtenlo...)
Y mañana, si la autoridad y el internet me lo permitan, de nuevo estaré aquí para relatarles mis inquietudes...
...Pero sólo si me prometen que Uds. estarán ahí para leerlas...
mi cabeza en el hombro de la luna
y le hablo de esa amante inoportuna
que se llama soledad. " ( Joaquín Sabina )
Esta noche, me he dormido, recostado entre las nubes...
Entre las nubes de mis días y mis noches...
Entre las nubes que pueblan mis cielos...
Entre blancas nubes de algodón parecidas a las nubes con las que los niños sueñas, recostaditos en sus cálidas cunas...
Unas nubes, de inmaculada blancura nívea, y aspecto algodonoso y suave, que invitan, que incitan a recostarse entre ellas, y dejarse llevar, agarradito en volandas, por las hadas de los sueños, que irremisiblemente me conducen a los mundos de Morfeo.
Un mundo, en el que todo es posible, en el que lo real se hace ficticio y lo irreal...real...
Un mundo en el que los mas íntimos deseos, pensamientos y anhelos tienen cabida, sin temor a que alguien nos tache de locos orátes, de tarados enamorados de la mar, de la luna y de la noche; cuya imaginación...está desbocada, y sin control, vaga por lo etéreo del subconsciente, buceando entre viejos recuerdos y olvidadas nostalgias...
Un lugar donde la ternura tiene su hogar, alejada del mundanal ruido y de las gentes que viven su día a día, embebidos , inmersos en sus problemas y en su existencia...y subsistencia...
Un remanso de paz entre el cotidiano cáos de la humanidad...
Un paréntesis; punto y aparte en la existencia, que parece pararse en esos momentos felices, en los que quisiéramos parar las manecillas del implacable reloj, o en todo caso atrasarlas de nuevo, para que esos momentos se dilatasen para toda la eternidad...
Una eternidad poblada por hadas, magos y brujas, buenas y malas. Aves del paraíso y corceles alados, con y sin cuerno en la frente...
Un lugar, en el que en los crudos inviernos, las rosas también florecen y las violas y petunias tapizan los caminos...
Un lugar donde se encienden hogueras en las plazas, para ahuyentar al lobo, como decía la canción.
Donde las guerras, sólo son entre soldaditos de plomo con los que los niños juegan...
Donde no existe el tiempo ni la edad, y la enfermedad sólo es un lejano recuerdo del pasado...
Donde en las calles, crecen las madreselvas, que trepando por los edificios, tapizan tejados y chimeneas...
Donde en vez de sirenas, lo que se escucha es música de violines y campanillas, y donde las mariposas se posan a tomar el sol sobre las señales de tráfico...
Un mundo diferente, extraño a muchos ojos, donde en vez de fuentes, en los parques hay lagos llenos de peces de colores, y donde los mercados, aun siguen siendo aquellos antiguos lugares donde la gente compraba alimentos, frutas y verduras, anunciadas a voz en grito por las alegres fruteras y verduleras con cantarinas voces de coro de orfeón...
Un lugar donde la paz es la reina y señora, adorada y respetada por todos, y donde esa paz, ayudada por otra dama a quien llaman justicia, reparten a diario dosis de alegría y humanidad en ese mundo, donde ya tienen de sobra...
Un lugar donde me gustaría quedarme para siempre...
Si buscas ese lugar, lo hallarás...
Tal ves allí, justo debajo; en la falda de las montañas...
Sólo tienes que cerrar los ojos, oír, recordar y dejarte llevar...
tal vez allí, al igual que yo, encuentres tu lugar...
Tal vez ahí...Puedas hacer realidad tus mas ansiados sueños...
Recuerda...
Sólo tienes que buscar...En tu interior...
Sólo tienes que buscar...entre tus sueños...
...Háganme un favor...Quieren ?...
...Sean felices...
( O por lo menos...Inténtenlo...)
Y mañana, si la autoridad y el internet me lo permitan, de nuevo estaré aquí para relatarles mis inquietudes...
...Pero sólo si me prometen que Uds. estarán ahí para leerlas...
©( JotaJota)
http://youtu.be/pgKOrG8jcsQ
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