Esta noche, de nuevo cae la lluvia...
El cielo llora la nostalgia de mil penas escondidas...
El agua cae mansamente sobre la tierra, empapando hasta las almas de aquellos nostálgicos, que al son de la lluvia, apresuran su caminar, para refugiarse en cualquier portal, al igual que las parejas de enamorados...
Recuerdo tiempos remotos, hace siglos...
Cuando joven aún, también me gustaba caminar b
El cielo llora la nostalgia de mil penas escondidas...
El agua cae mansamente sobre la tierra, empapando hasta las almas de aquellos nostálgicos, que al son de la lluvia, apresuran su caminar, para refugiarse en cualquier portal, al igual que las parejas de enamorados...
Recuerdo tiempos remotos, hace siglos...
Cuando joven aún, también me gustaba caminar b
ajo la lluvia, dejándome empapar por sus gotas cristalinas y purificantes...
Yo, también me refugiaba en los portales, bajo las cornisas de los edificios, de cuando en cuando, para, parado, ver a las gentes apresurar el paso para no mojarse...
Yo también he mirado caer la lluvia detrás de los cristales, salpicándolos con diminutas gotas, que cobraban vida propia, para lentamente, resbalar cristal abajo hasta descansar sobre el alféizar...
Yo también he sentido esa misma nostalgia. Esa nostalgia que sólo traen consigo esos días empañados en la humedad de la lluvia...
Esos días, en que el cielo está gris, presagiando y anunciando mas lluvia...Mas color gris...mas nostalgia...
Mas llegó un día, en que me tuve que tragar esa nostalgia junto con las lágrimas...
Mas adelante, aprendí a convivir con ella, que aparecía apenas el cielo tomaba un ligero tono gris...
Aprendí a convivir con ella, y a mojar esa pena en la taza de café, como si fuese una tostada, untando sobre ella penas agridulces a modo de mermelada...
Aprendí a tragarme las lágrimas, aún cuando pugnaban con fuerza para salir a torrentes a través de mis ojos...
Tragármela...y digerirla antes de seguir con mi vida...
Mas llega un momento en la vida, en la que nuestra mente madura; se hace adulta; envejece, al igual que envejecemos nosotros, y las canas hacen acto de presencia en nuestra cabeza, a la par que las arrugas, esculpidas a golpe de años, dibujan nuestra piel con profundos surcos, como los ríos quedan dibujados en un mapa, extendiéndose, ramificándose, haciéndose un manojo de
canales, que cada día, se hacen mas y mas profundos...
A mi mente acuden imágenes empañadas de aquel pasado, cuando todos los días eran diferentes, y cada hora, se me presentaba como un nuevo reto...
Hoy, esa sensación de aventura, ha desparecido, dejando su lugar vacío; un vacío que la monotonía se ha apresurado a ocupar de forma clandestina, igual que el agua ocupa los lugares vacíos...
Que lejanos me parecen esos momentos ahora...
Cuán polvorientos los recuerdos, que conviven a mi lado, junto a viejas fotos amarilleadas por el paso de los años...
Que lejanos quedan ya los ecos de aquellas palabras, leídas en algún grueso libro, alumbrado a la luz de una vela...
Ahora, las estrellas, se han convertido en potentes farolas con bombillas led, que le dan a la vida un aire de frialdad, de artificialidad...
Ya no se pararán las parejas bajo ellas para darse un beso bajo la ambarina luz...
Ya no se reunirán las pandillas de amigos al abrigo de su luz, para comentar las vicisitudes del día recién terminado...
Ya no el darán a las casas oscuras, esa espacie de luminosidad misteriosa que solamente esa luz les daba y que se repetía cada noche, mientras las sombras vagaban en la calle...
Ahora...
Ahora ya es demasiado tarde para volver atrás, y sólo podemos seguir adelante; siempre adelante, empujados por sabe Dios que misteriosa fuerza, que nos hace levantarnos cada día para continuar con nuestras vidas...
Ahora...Es demasiado tarde...
http://youtu.be/IrR0-mIbBrI
...Háganme un favor... ¿ quieren ?...
...Sean felices...
( O por lo menos...Inténtenlo...)
Yo, también me refugiaba en los portales, bajo las cornisas de los edificios, de cuando en cuando, para, parado, ver a las gentes apresurar el paso para no mojarse...
Yo también he mirado caer la lluvia detrás de los cristales, salpicándolos con diminutas gotas, que cobraban vida propia, para lentamente, resbalar cristal abajo hasta descansar sobre el alféizar...
Yo también he sentido esa misma nostalgia. Esa nostalgia que sólo traen consigo esos días empañados en la humedad de la lluvia...
Esos días, en que el cielo está gris, presagiando y anunciando mas lluvia...Mas color gris...mas nostalgia...
Mas llegó un día, en que me tuve que tragar esa nostalgia junto con las lágrimas...
Mas adelante, aprendí a convivir con ella, que aparecía apenas el cielo tomaba un ligero tono gris...
Aprendí a convivir con ella, y a mojar esa pena en la taza de café, como si fuese una tostada, untando sobre ella penas agridulces a modo de mermelada...
Aprendí a tragarme las lágrimas, aún cuando pugnaban con fuerza para salir a torrentes a través de mis ojos...
Tragármela...y digerirla antes de seguir con mi vida...
Mas llega un momento en la vida, en la que nuestra mente madura; se hace adulta; envejece, al igual que envejecemos nosotros, y las canas hacen acto de presencia en nuestra cabeza, a la par que las arrugas, esculpidas a golpe de años, dibujan nuestra piel con profundos surcos, como los ríos quedan dibujados en un mapa, extendiéndose, ramificándose, haciéndose un manojo de
canales, que cada día, se hacen mas y mas profundos...
A mi mente acuden imágenes empañadas de aquel pasado, cuando todos los días eran diferentes, y cada hora, se me presentaba como un nuevo reto...
Hoy, esa sensación de aventura, ha desparecido, dejando su lugar vacío; un vacío que la monotonía se ha apresurado a ocupar de forma clandestina, igual que el agua ocupa los lugares vacíos...
Que lejanos me parecen esos momentos ahora...
Cuán polvorientos los recuerdos, que conviven a mi lado, junto a viejas fotos amarilleadas por el paso de los años...
Que lejanos quedan ya los ecos de aquellas palabras, leídas en algún grueso libro, alumbrado a la luz de una vela...
Ahora, las estrellas, se han convertido en potentes farolas con bombillas led, que le dan a la vida un aire de frialdad, de artificialidad...
Ya no se pararán las parejas bajo ellas para darse un beso bajo la ambarina luz...
Ya no se reunirán las pandillas de amigos al abrigo de su luz, para comentar las vicisitudes del día recién terminado...
Ya no el darán a las casas oscuras, esa espacie de luminosidad misteriosa que solamente esa luz les daba y que se repetía cada noche, mientras las sombras vagaban en la calle...
Ahora...
Ahora ya es demasiado tarde para volver atrás, y sólo podemos seguir adelante; siempre adelante, empujados por sabe Dios que misteriosa fuerza, que nos hace levantarnos cada día para continuar con nuestras vidas...
Ahora...Es demasiado tarde...
http://youtu.be/IrR0-mIbBrI
...Háganme un favor... ¿ quieren ?...
...Sean felices...
( O por lo menos...Inténtenlo...)
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